No somos los mismos que ayer: el cambio en los humanos
Con el transcurrir de los años notamos que no somos los mismos individuos ya que nuestro ser cambia física y mentalmente desde nuestras actitudes y patrones mentales. Es algo que se puede percibir a primera vista, principalmente cuando notamos esos cambios de 5 o 10 años atrás, pero esto va más allá de lo que apreciamos en grandes cantidades de tiempo ya que a nivel molecular cambiamos incluso a diario.
El paso del tiempo es notorio de forma diaria nuestro cuerpo tiene miles de millones de células hasta 37 billones de células distintas y es allí donde podemos ver que cada una de estas células trabaja de forma constante sin detenerse en nuestro organismo.
No somos los mismos a nivel celular
Biológicamente no somos los mismos ya que el ser humano es reemplazado todos los días. Considerando que de esos billones de células miles tienen un ciclo de vida muy reducido, como las células de sangre con un periodo de uno a cinco días como máximo. Esto hace que el cuerpo renueve esas células a diario haciendo que el cuerpo humano sea en cuestión de días uno completamente distinto.
El sueño reparador
No somos los mismos ya que al dormir nuestro cuerpo se mantiene en un estado de reposo que permite que algunas células avancen y aceleren sus procesos para renovarse y reparar estructuras, en caso de poseer alguna herida o daño interno, ésta se recupera más rápido con el descanso adecuado, siendo este uno de los hábitos más importantes del hombre junto al beber agua y mantener una hidratación constante.