Lavanda: lo mejor para liberar el estrés según la ciencia

Con la masiva oleada de personas que actualmente habitan en este planeta tierra, se puede decir que, a diario vivimos en una sociedad demasiado poblada y constantemente no sentimos atosigados y estresados, desde que inicia  el día hasta que termina el mismo.

Todo debido a la gran sobre población, en especial, en las ciudades más grandes del mundo, donde los primeros sonidos del día, son los disturbios que ocurren en las autopistas como consecuencia de los altos niveles de tráfico, lo que conlleva a comenzar el día un poco desagradable y que termina con una ardua jornada de cansancio y estrés por el desgaste hecho durante todo el día.

¿Cómo puede la lavanda liberarnos del estrés?

La lavanda es una de plantas más bellas del mundo y, cuenta con propiedades impresionantes porque estudios recientes han descubierto que por el alto contenido de linalool que posee la misma, al ser olfateada provoca una sensación de relajación impresionante; incluso para las personas que sufren trastornos como la ansiedad.

Beneficios de no tener estrés

Si aún no estás totalmente conforme de usar la lavanda para no tener más estrés, debes conocer los beneficios que trae estar liberado del mismo, los cuales son los siguientes:

Mantienes una mente totalmente despejada:

Este es una de los factores que más afecta el estrés, debido a que la mente es donde recala todo lo que nos pasa y tenerla liberada del estrés ayudara a despejarla por completo para así poder rendir en las actividades que tengamos como obligación.

Podrás obtener un mejor descanso:

Tener una mente libre de estrés ayudara a concebir el sueño más rápido, lo que hace nuestro cuerpo este estado reposo y podamos descansar para poder afrontar las distintas actividades al día siguientes.

Libera la tensión:

Una de las partes más sensibles del cuerpo son los músculos, ya que cuando acumulamos niveles de estrés altos, los músculos comienzan a tensionarse. Por ende, comenzamos sufrir de dolores musculares sobre todo la zona de la espalda y del cuello.  Por lo tanto, si los niveles de estrés se encuentran bajos podemos sentir la sensación de alivio y de no estar rígidos.