El wasabi, un peculiar condimento
Como ya se ha dicho anteriormente esta exótica raíz ha sido usada como condimento en la gastronomía japonesa desde tiempos milenarios, gracias a la sensación de picor que produce, la cual se diferencia claramente de la pimienta, el ají, el chile o el jengibre. De allí que el wasabi como especie, gracias a la acción de los isotiocianatos, actúe de forma distinta a la capsaicina que es uno de los tipos de picantes más consumidos en el Occidente.
Los isotiocianatos son compuestos de azufre con extraordinarias propiedades anti bacteriales y en consecuencia pueden inhibir el crecimiento de microorganismos perjudiciales para la salud, actuando como coadyuvante en la eliminación de toxinas y reforzando las defensas antioxidantes del cuerpo.
Una de las principales diferencias del wasabi con respecto a otros tipos de picantes es que su sensación de picor afecta nuestra nariz por los vapores que suben a través de las fosas nasales provocando goteo y lagrimeo, pero es instantánea, poco duradera y no suele afectar al estomago.
Beneficios del consumo de wasabi para la salud
Este picante verde ha demostrado ser altamente beneficioso para la salud de los humanos, especialmente por sus propiedades antisépticas y antibacterianas, siendo capaz de combatir infecciones en heridas o lesiones de la piel, problemas o trastornos respiratorios, además de ayudar a prevenir la formación de caries y resultando muy eficaz para el alivio de molestias generadas por hemorroides y ulceras.
Otro de sus principales beneficios es su efectividad para aliviar inflamaciones y dolores en las articulaciones y ello es gracias a su efecto bloqueador de agregación plaquetaria, lo cual reduce considerablemente los riesgos de sufrir ataques cardiacos o accidentes cerebrovasculares.
Gracias a su alto contenido de vitamina C resulta muy efectivo en el tratamiento de congestiones nasales y en la prevención de alergias varias. Ayuda a subir las defensas naturales del cuerpo y estimula o promueve la producción de saliva para favorecer los procesos digestivos. Posee también efectos antioxidantes que protegen las células de los radicales libres, impactando positivamente en la piel, huesos y todos los tejidos.
Se le utiliza desde hace mucho tiempo en el tratamiento de infecciones intestinales o diarreas y adicionalmente se le asocia a la prevención del crecimiento de células cancerígenas gracias a su alto contenido de isotiocianatos que preparan al hígado para combatir sustancias tóxicas varias.
Además de su intenso sabor es una rica fuente de fibras que favorece los procesos digestivos.
