Cómo combatir la acidez
Ante un diagnóstico de acidez, sin duda deben cambiarse ciertos hábitos de vida que ayuden a contrarrestarla. En ocasiones además de la forma de alimentación existen situaciones o antecedentes clínicos gracias a los cuales esta condición se manifiesta de manera recurrente y lo más apropiado es acudir a consulta con un especialista para verificar sus causas específicas.
Cuidar lo que se ingiere es el primer paso para controlar y reducir la acidez. Adicionalmente existen algunos remedios caseros o naturales para mejorar la digestión y evitar la aparición de esta molesta afección. El Te de hinojo es una excelente alternativa, después de las comidas, así como el jugo de limón puro o ½ vaso de leche fría.
Algunas recomendaciones para reducir las probabilidades de tener acidez, serían:
- Evite comer en grades cantidades
- Evite el consumo de alimentos ácidos, grasosos, picantes y excesivamente condimentados
- Evite fumar
- Evite ingerir líquidos con las comidas
- Evite acostarse a dormir inmediatamente después de haber comido
- Utilice una almohada para dormir
- Evite usar prendas de ropa ajustadas
- Evite pasar muchas horas sin comer
- Realice algún tipo de ejercicios físicos de forma regular
- Evite la auto medicación
Alimentos que ayudan a reducir o combatir la acidez
A pesar de que la acidez puede estar asociada a otras afecciones o alteraciones estomacales, la mayor parte de las veces se manifiesta a causa de los alimentos que se consumen. En tal sentido, la dieta o régimen que se siga puede ser un gran aliado para contrarrestar sus síntomas y recurrencia. Es bueno agregar que si la acidez estomacal no se corrige lo más pronto que fuese posible podrían presentarse problemas como la pirosis; por ello es vital estar al tanto de nuestro médico de confianza o los consejos que te ofrecemos en este post.
Algunos de los alimentos que se recomiendan para reducir la acidez, son:
- Calabacín: gracias a su contenido de mucílagos favorece y facilita los procesos digestivos y reduce el reflujo o gastritis. Debe evitarse frito o rebozado y preferirse sancochado.
- Avena: su contenido en mucílagos suaviza la mucosa digestiva y la convierte en un antiácido natural. Se puede ingerir después de haberla remojado durante la noche o a modo de atol.
- Calabaza o auyama: su contenido de mucílagos la convierte en un emoliente natural y los betacarotenos protegen la mucosa digestiva.
- Manzana: su alto contenido en pectina la ayuda a neutralizar la acidez y un trozo alivia el ardor rapidamente.